Después de sufrir lesiones por un accidente de coche u otro tipo de lesión personal, es posible que no esté pensando en acudir a los tribunales. Al fin y al cabo, los juicios por lesiones personales no son muy habituales, ya que sólo representan el 10% de los casos civiles. Sin embargo, si al final tiene que ir a juicio, querrá asegurarse de obtener el mejor resultado posible.
Es posible presentar una demanda contra la parte responsable o su compañía de seguros y tener un juicio programado, sólo para obtener un acuerdo en el último minuto. Pero si eso no sucede, tendrá que luchar en los tribunales, y los juicios pueden ser impredecibles. Esto puede ser bueno, ya que le permitirá recibir mucho más dinero del que habría obtenido en un acuerdo. También puede ser perjudicial, ya que el jurado puede favorecer a la otra parte y hacer que usted reciba muy poco o incluso nada.
Hay mucho trabajo que hacer incluso antes de ir a juicio. Esto se denomina fase previa al juicio y es muy importante para el caso, ya que implica reunir documentos importantes. Se trata de un proceso conocido como descubrimiento. La otra parte puede exigir declaraciones de testigos, historiales médicos y documentos financieros. Este proceso también incluye la recopilación de pruebas mediante deposiciones e interrogatorios, que son preguntas escritas a las que una parte responde bajo juramento. Ambas partes deben compartir toda la información. Si su abogado solicita determinados documentos a los abogados del demandado, éstos deben proporcionárselos. El proceso de proposición de prueba por sí solo puede durar muchos meses o incluso años.
Las partes también pueden solicitar una mediación para intentar resolver los problemas y llegar a un acuerdo antes de acudir a los tribunales. Pero si no tienen éxito, entonces tendrán que proceder a un juicio.
El Juicio
He aquí una versión resumida de lo que ocurre. Durante el juicio, cada parte tiene la oportunidad de presentar sus pruebas. Los abogados interrogarán a los testigos y expondrán sus argumentos. Esto incluye declaraciones de apertura de cada abogado, testimonios de testigos y argumentos finales que resumen la posición de cada parte. Basándose en estos argumentos, el juez o el jurado tomarán una decisión final. Decidirán sobre la culpa, los daños y otras cuestiones legales relevantes para el caso.
Los juicios suelen ser rápidos, y el veredicto suele decidirse en menos de una semana. Gran parte de este tiempo consiste en seleccionar un jurado y escuchar el testimonio de los testigos. El jurado puede tardar unas horas en decidir o varios días, dependiendo de la calidad de las pruebas,
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Los juicios por lesiones personales son poco frecuentes, pero es bueno conocer el proceso por si alguna vez ocurre.
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